Por Toni Roderic, Secretario de Organización de la Confederación de Los Verdes · Els Verds · Berdeak · Os Verdes.
Y lo hacen sin inmutarse.
Seguramente, hemos estado aguantando demasiadas cosas porque habíamos perdido las referencias de lo que era ser de clase obrera y porque el poder del dinero, sobretodo, nos había hecho mirar la sociedad desde el punto de vista hegemónico de los que controlan el capital y los medios de producción.
Sí, sí, seguramente, también, ayudados por la socialdemocracia europea y española. Nos decían que bajar los impuestos era de izquierdas y, después, no tuvieron ningún problema en hacer una ley hipotecaria para poder desahuciar a la gente con total impunidad y rápidamente, en empeñar, por muchos años, al estado con compras masivas de material de guerra, en la congelación de las pensiones, en los recortes a los funcionarios, con leyes laborales infumables, en las concesiones a dedo -tipo Castor- y en reformas de la Constitución –artículo 135- abrazados al PP, a las órdenes de Merkel, sin transparencia, sin debate y violentando la democracia.
Nos está costando mucho darnos cuenta de que nos están estafando, de que nos están robando muchas de las cosas que eran nuestro patrimonio -nuestro porque lo habíamos conseguido con nuestro esfuerzo y con nuestro dinero-, como la sanidad pública, la educación, los servicios sociales, nuestras instituciones financieras -las cajas de ahorro que eran una especie de banca pública-, las pensiones, nuestro nivel de vida, el empleo, la movilidad, el medio ambiente, el derecho al propio cuerpo… Todo lo público, lo nuestro, nos lo están robando de mala manera para hacer negocio con todo.
Y lo hacen sin inmutarse. Con la mentira por bandera, con cinismo e hipocresía, de manera cutre, perversamente, con la prepotencia de los que tienen todas las armas a su servicio: nos han declarado la guerra.
Alguna cosa tendríamos que hacer, aunque sólo sea por dignidad.